La cazadora y el Dolophomos. Epílogo.

Acheron sonrióo al ver la escena desde lejos, apoyado en una pared y recubierto por las sombras. Unas manos femeninas rodearon su cintura desde atrás.

 Ya no se sobresaltaba con esto. Sonrió, ella lo había curado de formas inimaginables.

-¿Espiando de nuevo Aquimou?-  Dándose vuelta abrazo a Sota y la pegó a su cuerpo mientras enterraba su cara en el pelo de su salvación .

- Sólo cuidando de aquellas personas a las que entrené -

-Ya no eres responsables por ellos Ash-  Aunque lo había dicho Tory sabía que su esposo jamás dejaría a sus guerreros a la deriva

- Siempre voy a ser responsable Sota, fueron creados por culpa mía. - Y era algo que odiaba. Tory sonrió y acarició su mejilla suavemente.

- Y luego dices que estas maldito. Tienes un corazón muy grande, asumes culpas que no son tuyas y cuidas de la gente. Por eso ellos te son leales Acheron solo se quedó allí._

Con su amor entre sus brazos y mirando dónde se había ido la pareja. El ángel no lo había mirado con rechazo ni asco. Él ,que pensaba ser indigno de todos ellos, recibió una sonrisa ¿acaso alguna vez habría salvación y paz para él, aparte de lo que su familia le daba?

Suspiró y dejó de pensar. Ahora su vida pertenecía a su esposa e hijos. De hecho jamás soñó con tener esta clase de amor así que el tiempo diría lo demás.


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Ares pateó todo lo que encontró.

Juró por su vida que su hijo le pagaría esta...con su esposa o sus hijos pero terminaría haciéndolo sufrir aunque tuviera que morir en manos de Arcángeles .


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Azura rodeó con sus manos los hombros de Noir y mordió un poco su cuello. El gruñido de él fue música a sus oídos que bajó hasta su sexo

- Tenemos a los skotos de Ares, mi amante. Pronto los tendremos a ellos - Noir levantó la mano y agarro la nuca de Azura con brusquedad

- Me estoy cansando de esperar pero te juro que cuando pueda salir de aquí me vengaré de todos. Deimos y su esposa serán los primeros junto con esos dioses lame-culos-de-zeus. -

Tomó los labios de su amante con brusquedad para disfrutar de una de las pocas cosas que más satisfacción le daba, al menos hasta que tuviera le suficiente poder para salir de su hogar y llevar el infierno a la tierra.



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Deimos estaba recostado con Janice en sus brazos.

Habían decidido vivir en la casa que le pertenecía a ella....ahora era de los dos. Mirando el techo sabía perfectamente que sus problemas no se habían terminado. Ares y los chicos malos de Azmodea no pararían nunca.

Ahora estaba gravemente preocupado si llegaban a tener hijos. Jan abrio los ojos y vio la preocupación en la cara de su marido. Suspiro y se incorporo un poco

- Debes dejar de preocuparte amor - Antes que Deimos dijera nada beso sus labios - Sé que esto no termino, que tenemos muchas cosas en contra y el peligro nos espera pero somos una pareja guerrera Deimos. Y tenemos mucha ayuda -

Sonriendo acarició su pelo - Patearemos traseros y , si pueden hacernos sufrir nos aseguraremos de hacerlos gritar y retorcerse aún más -

Deimos sonrió a su esposa y tomo sus labios en un beso lento y profundo mientras acariciaba su trasero

- Creo que es hora de hacer nuestro pequeño ejército Al ver que ella no se daba por entendida dio vuelta con su cuerpo para quedar encima de ella  - Vas a tener mis hijos Jan -  Ella abrió la boca sorprendida, seguramente se había dado cuenta que ahora podía quedar embarazada.

Riéndose se introdujo en ella  - Nos aseguraremos de amar y proteger a nuestra familia Jan pero mientras tanto vamos a divertirnos buscándola-  Fundió sus labios en los suyos comenzando de nuevo con la diversión que planeaba practicar con ella por toda la eternidad.

¿FIN?